Por: Felipe Guillén
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Fotografía: Claudia Montes
La playa siempre es un lugar atractivo para salir a descansar con toda la familia y por eso debemos tomar todas las precauciones para que resulte un paseo seguro y agradable.
Lo primero que debemos hacer es escoger bien el lugar teniendo en cuenta las características de la zona, la infraestructura hotelera, las vías de acceso y la calidad de los servicios, incluyendo el de salvavidas y un centro de salud donde se puedan recibir los primeros auxilios. Así resulte divertido caminar descalzo sobre la arena es mejor utilizar zapatillas cuando se trata de playas muy visitadas ya que es común encontrar restos de vidrio o de otros materiales que podrían lastimarnos y producir heridas que pueden infectarse fácilmente.
Una tentación que resulta irresistible para nuestros hijos es exponerse al sol durante varias horas seguidas, por lo cual deben tomarse algunas medidas preventivas tales como beber gran cantidad de agua para reponer los líquidos perdidos por la sudoración y para prevenir quemaduras es recomendable aplicar en todo el cuerpo protectores con un filtro solar no menor de 20,en caso de menores con piel muy blanca es importante consultar con el pediatra sobre el factor de protección que necesita y el tiempo que podría asolearse sin exponerse a una insolación. El hecho de utilizar un filtro solar no implica que los niños puedan estar expuestos más tiempo al sol, esta sólo ayuda a proteger su piel y además es necesario estarlo renovando, en especial cuando es de los que desaparecen al contacto con el agua, el sudor o el uso de la toalla. El mar es un amigo al que hay que respetar y por eso deben observarse algunas medidas preventivas como sumergirse poco a poco antes de zambullirse por completo si la diferencia de temperatura del cuerpo y del agua es muy alta.
Hay que tener en cuenta que los implementos que se utilizan regularmente en una piscina como las aletas, los colchones inflables y los accesorios para aprender a nadar no son recomendables en el mar debido a que pueden ser impulsados por las corrientes o el viento y convertirse en algo muy difícil de manejar, aún por expertos nadadores.
Así se trate de una playa privada estos lugares están llenos de peligros y por eso nunca es aconsejable dejar a los niños solos ya que en el momento de una emergencia es complicado que puedan resolverse por sí mismos o que estén a tiempo para pedir ayuda.
Cuando se va a tomar el sol es recomendable utilizar un sombrero para proteger la cabeza de los rayos solares, no se debe estar por más de dos horas seguidas, si el calor es intenso lo mejor es humedecer la cabeza cada media hora y evitar exponerse o practicar algún deporte durante las horas de mayor intensidad, que están entre las 10:00 y las 15:00.
Se debe estar siempre atento a las señales de las autoridades sobre las condiciones del mar y si ves banderas de color negro, roja o amarillo debes alejarte porque son alertas de peligro, también es conveniente observar si hay presencia de Aguamalas (medusas)ya que siempre estaremos expuestos a la picadura de estos animales. Si la playa es rocosa lo mejor es evitarla ya que es muy fácil sufrir accidentes al caminar y además existe la posibilidad de ser arrastrado por una ola y caer derribado sobre las superficies irregulares y filosas de las piedras.
Hoy en día la tecnología ofrece muchos productos novedosos y económicos que nos ayudan a protegernos de los rayos solares como las pegatinas o stickers “SunSignals UV Sensors”, que se colocan sobre la piel de los niños y cambian de color para indicar cuando se debe aplicar nuevamente crema protectora.
También se ofrece la pulsera de chequeo personal “SunCheck Personal Wrist-Meter” que señala la intensidad de los rayos UV e indica el factor de protección solar que debe utilizarse.