El que Lee, Activa Grandes Zonas del Cerebro, el que no, Tiene Muchas Zonas del Cerebro Quietas
por: Carolina Acosta
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“Un país cuyos habitantes no leen o leen escaso es más vulnerable al engaño”
Fermín Bocos
En el mundo, leer es una de las habilidades más necesarias para una persona, es una práctica integral, que involucra el funcionamiento de varias actividades complejas de la mente, que van de la mano con el surgimiento de la escritura y las primeras manifestaciones humanas.
Es un acto de crear y recrear, de conocer, de aprender a pensar, de generar ideas, es una herramienta fundamental que nos permite convertirnos en seres pensantes autónomos y con mayores opciones de integrarnos a la vida laboral, social y afectiva.
Desde la semántica, el término leer viene del latín legĕre que significa pasar la vista por lo escrito o impreso, comprendiendo la significación de los caracteres empleados. En consecuencia, es el proceso por el cual se aprende a descodificar o descifrar un determinado sistema de escritura.
La escritura surgió como una necesidad de expresión
Aunado a esto, vale la pena mencionar algunos hitos importantes que marcaron la evolución de la lectura a partir del surgimiento de las primeras manifestaciones escritas de la civilización humana. Sus inicios al parecer, datan desde el periodo del hombre neolítico hace más de 5.000 años a. C., con las primeras imágenes grabadas sobre piedra llamadas petroglifos, a través de las cuales se registraban hechos e historias para ser narradas. Más adelante, los fenicios con la utilización de un tipo de escritura más avanzada inventan la escritura jeroglífica, posterior a ello modifican dicha escritura y forman un alfabeto de 22 signos, en el cual cada uno representaba un sonido. La evolución de la escritura a partir de estas culturas fueron la base sobre la cual aparecen después otras civilizaciones con nuevos aportes que permitieron años más tarde, la difusión masiva del mensaje, entre estos: la imprenta, los libros y todas las herramientas que el hombre ha creado gracias a la tecnología.
Leer activa grandes zonas del cerebro
Los motivos de la escasa lectura en América latina son diversos, podría enumerar un sinnúmero de justificaciones que van desde la falta de hábitos de lectura en el ambiente familiar, la desescolaridad, la violencia, la escasez de tiempo, la pobreza y la ausencia de librerías en zonas rurales y urbanas del país, el déficit en las bibliotecas públicas y la cultura audiviosual en sus diversas formas. En conclusión no hay un mayor grado de lectura.
Lo anterior, es un panorama que demuestra que es un simple acto de acceder a la información, y no una herramienta fundamental que nos permitirá tener una inclusión más participativa en la sociedad, y en la construcción de una articulación intelectual.
¿Pero son conscientes los individuos de estos aportes que tiene la lectura para la vida?, ¿alguna vez ha pensado en el proceso que su cerebro hace cuando lee?
Leer es un proceso que comprende dos áreas: una visual y otra mental. Según Sigman Mariano, físico de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires."La palabra es un objeto visual que corresponde a un ente semántico, obviamente, este objeto visual depende de la notación que uno emplea, que en nuestro caso son símbolos que se recombinan según distintas reglas. Uno aprende a leer deletreando, pero hay un momento en que ve ese objeto como un todo y aunque cambien un poco algunas partes igual lo reconoce".
Desde el punto de vista de un psicoanalista en este proceso "La visión recoge los estímulos luminosos, lleva estos estímulos a través de la retina al cerebro, (región posterior occipital), allí el cerebro comienza a traducir de acuerdo con la información que posea, la procesa y además se encarga de crear las imágenes e identifica cada letra o cada garabato; hay grandes zonas del cerebro dedicadas solamente a la comprensión y análisis de la lectura" Afirma el médico psiquiatra Álvaro Rodríguez Gama, profesor titular de la Universidad Nacional de Colombia.
Es interesante vislumbrar cómo nuestro cerebro comprende, interpreta, reconoce, analiza, decodifica, relaciona y discrimina la información. Cuando tan solo leemos una palabra, estamos enviando una cantidad de información relacionada con la forma, el color, el significado y el significante, entre otros aspectos. Cabe mencionar entonces que la lectura es una actividad compleja que requiere de un continuo entrenamiento.
En el ambiente familiar es en donde se aprende a hablar, leer y escribir
Según los expertos desde el vientre de la madre se debe motivar e incentivar la lectura en los niños y niñas, a través de cuentos, fábulas y poesías cortas. Se puede decir que lo primero que un recién nacido lee es el rostro de su madre y la voz de sus padres. Este acto de lectura significa sin lugar a dudas, la puesta en movimiento de la actividad cognitiva. La cara de su madre es un elemento fundamental para el desarrollo del pensamiento, algunos autores como Evelio Cabrejo Parra, sicoanalista colombiano, dice: “La cara de su madre no es simplemente una boca, una nariz y dos ojos sino un libro que permanentemente envía informaciones que el bebé maneja a cada instante. Los adultos atribuyen intención comunicativa al niño desde muy chicos, lo involucran en un intercambio en el que el mismo adulto, es el que le da el significado a las expresiones faciales, movimientos de manos y otros gestos: modos de mirar, sonidos que se emiten e incluso el llanto. De esta manera los bebés comprenden que los gestos tienen poder comunicativo porque ven una respuesta a ello”
De otro lado, se recomienda leerles a los niños y niñas desde muy temprana edad, lecturas con rima, ritmo o música, características esenciales que les ayudarán a desarrollar el oído para comprender el lenguaje, ya que la rima y el ritmo destacan los sonidos y las sílabas de las palabras. Sumado a lo anterior, los niños también deben estar en contacto con juguetes con el fin de incentivar el acercamiento a la lectura. El doctor Rodríguez señala lo siguiente en ese aspecto: “Los niños siempre deben tener hojas en la mano, no importa que sea para dibujar, para rayar, no importa que no estén leyendo, que no entiendan, lo más importante es que la gente les lea, eso despierta totalmente la curiosidad en el niño. Si él ve leer a su padres, si ve que llega el periódico a la casa, si tiene todos esos elementos se va a interesar por leer los libros...”. “otra cosa que les fascina es que les lean cuentos, mejor si es en la noche, porque en la noche los niños se llevan muchos de esos elementos para su cabeza para sus sueños, de esa manera les va penetrando la lectura. La gente que ha recibido lectura de cuentos en la noche termina siendo los mejores lectores y escritores del mundo”. Aunque claro está, para ser un buen escritor o buen lector se necesita continuamente estar entrenando, y más aún si no se ha vivido en un ambiente de lectura, es decir leer como lo menciona Luis Enrique Pachón3 como sujetos dinámicos y activos. A continuación menciono algunas recomendaciones que los expertos recomiendan para realizar una adecuada lectura.
Consejos prácticos
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Piense en qué temas le agradan, o qué le gusta hacer en la vida y averigüe qué textos existen sobre estos temas.
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Localice un lugar adecuado para leer. Trate de evitar las distracciones externas.
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Lea dos o tres veces y haga un análisis de la lectura, con el fin de comprender.
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Fíjese si entiende el significado de todas las palabras, sino es así consulte un diccionario.
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Practique la lectura durante tres o cuatro semanas intentando mejorar comprensión y rapidez durante 15 minutos cada día.
Para terminar, cabe mencionar la siguiente frase del escritor Luis Enrique Pachón “Si todos supieran leer y tomarle gusto a la lectura, cada casa llegaría a ser una escuela y cada biblioteca una facultad”. Así pues, los invitamos a seguir entrenando y activado el cerebro a través de lecturas amenas, no olvidemos, la lectura es una ventana para ampliar los horizontes través de la cual estamos accediendo a un mundo de infinitas posibilidades no solo culturales y científicas sino también para la formación en el desarrollo integral como seres humanos